Renaciendo en Libertad: La Historia de Julio

Mi nombre es Julio, soy del Estado de México, de Texcoco, y hoy quiero compartir algo que jamás pensé que un día estaría contando: mi propio camino hacia la libertad.

Antes de llegar a Narconon Sonora pasé por un proceso de tres meses en otro centro. Ese primer paso me ayudó a ordenar mi mente, a entender que mi vida podía ser diferente y que yo merecía algo mejor. Pero también me hizo ver que todavía me faltaba dar un paso más valiente… uno que me llevó hasta acá, hasta Sonora, donde inicié el programa de Narconon.

Aquí descubrí algo que no conocía:
que sanar no es solo dejar las drogas,
es reconstruirte por dentro, es volver a sentir, volver a creer, volver a vivir.

Durante este proceso he sanado mental, física y espiritualmente. Y algo que quiero dejar muy claro es esto:
el tiempo que inviertes en tu recuperación nunca es tiempo perdido.
Al contrario, es lo más valioso que puedes regalarte en la vida. Es una verdadera ganancia.

En el camino entendí que para avanzar tienes que mirarte por dentro, aunque duela. Por momentos es difícil enfrentar tu pasado, tus errores, tus heridas… pero cuando comienzas a soltar ese peso, empiezas a sentir algo que por mucho tiempo olvidaste: paz.

Si tú estás pasando por una adicción, quiero decirte algo desde el corazón:
sí puedes salir de ahí.
Sí puedes ser feliz.
Sí puedes volver a empezar.

Pero para lograrlo tienes que darte un regalo:
el tiempo de conocerte, de entenderte, de liberar todo lo que te está destruyendo por dentro.

El miedo y la inseguridad van a aparecer. Es normal.
Lo importante es que cuando lleguen, no te detengas. Solo acéptalos y sigue.
Ese simple acto de continuar, aunque tengas miedo, es lo que te va a llevar a la libertad.

Hoy puedo decir, con la frente en alto, que este es apenas el principio de una vida nueva.
Una vida donde yo tengo el control.
Una vida donde puedo ser plenamente feliz.

Y si yo pude… tú también puedes.

Julio, Estudiante de Narconon Navojoa